La caída del mes de julio se explica por el descenso de los créditos al consumo, que cayeron un 3,7% en el séptimo mes del año en comparación con 2010, hasta los 207.707 millones de euros.
De la misma forma, la deuda hipotecaria cayó un 1,1% en ese mismo periodo y se situó en 671.308 millones de euros, lo que supone el 76% del endeudamiento total de los hogares.
Esta proporción se mantiene desde varios años, ya que la caída de la inversión en vivienda ha sido paralela a la del endeudamiento total, por lo que el importe que las familias destinan a su hogar ocupa la mayor parte de su ahorro.
Al comparar con las cifras del mes anterior, la deuda de las familias bajó un 0,4% en julio después de haber repuntado ligeramente en junio. Los créditos al consumo cayeron un 1,8%, mientras que la deuda hipotecaria se mantuvo prácticamente estable.
La deuda de las empresas cae un 0,9%
Por su parte, la deuda de las empresas cayó un 0,04% en tasa intermensual y un 0,9% en tasa interanual, hasta los 1,2 billones de euros, debido, sobre todo, a la caída del 2,9% de los préstamos de entidades de crédito residentes y préstamos titulizados fuera de balance, hasta los 868.583 millones de euros.
En cambio, los valores distintos de acciones crecieron un 7,3% en el séptimo mes del año, hasta 67.169 millones, mientras que los préstamos al exterior aumentaron un 2,7%, hasta los 351.679 millones de euros.