Afes (Asociación de Afectados por Embargos y Subastas) ha acogido de forma esperanzadora la propuesta del Gobierno para que los bancos se acojan a un “Código de Buenas Prácticas”. Según afirma su presidente, Carlos Baños, «cualquier iniciativa tendente a mejorar el estado actual de la situación de las personas que no pueden pagar su hipoteca es positiva». Afes confía en que el “Código de Buenas Prácticas” anunciado por el gobierno abra la puerta al diálogo con los bancos a pesar de algunas lagunas de la propuesta”.
Esta propuesta se debe convertir en el inicio de la resolución de un conflicto que ha generado más de 400.000 afectados por la mora hipotecaria. Según comentan desde esta asociación, «si avanzamos en la buena dirección esta cifra se reducirá a menos de la mitad y, si por el contrario, se aplica con lagunas e ineficiencias, multiplicaremos este colectivo».
En opinión de Carlos Baños, “corremos el riesgo de aumentar la tasa de morosidad, pero por el contrario tenemos la oportunidad de iniciar un proceso de recuperación económica y social en el sector hipotecario, y en consecuencia, en el inmobiliario. Es posible recuperar para el conjunto del Estado a más de medio millón de ciudadanos, evitando incurrir en mayores pérdidas por parte de la Banca.
Según Baños, desde Afes se está elaborando un estudio más detallado sobre el posible impacto de las medidas anunciadas por el gobierno esta misma semana. En un primer análisis se han detectado los siguientes aspectos:
Aspectos positivos
- Damos la bienvenida a cualquier iniciativa tendente a mejorar el estado actual de la situación de las personas que no pueden pagar su hipoteca.
- Es bueno que se observe el problema de la mora desde más prismas que la mera ejecución hipotecaria con las consecuencias que ésta acarrea.
- Es importante que el Ejecutivo lance el guante a la Banca para que, asumiendo su parte de responsabilidad en el conflicto, empiece a formar parte de la solución y no sólo del problema.
- Estamos satisfechos de la reacción del sector financiero hacia el impulso de una resolución que también les reporte mejoras a sus problemas actuales.
Motivos de preocupación
- Entendemos que no se puede legislar excluyendo a otros afectados. Este concepto, el de afectado, no ha sido todavía comprendido.
- Nos preocupa que la repercusión mediática que anuncios como éste puede generar, concluya en un aumento de la tasa de morosidad, ya de por sí elevada.
- Falta concreción en los incentivos fiscales para que éstos se conviertan en agentes de revitalización del mercado inmobiliario y no sólo en compensaciones por acumulación de viviendas.
- Existe una gran indefinición en el modelo de aplicación de las medidas anunciadas.