La deuda de las familias bajó un 1,7% en el mes de julio en comparación con el mismo mes del año anterior, hasta los 882.420 millones de euros, el nivel más bajo desde el mes de enero de 2008, cuando ascendió a 878.541 millones, según datos del Banco de España.
La caída del mes de julio se explica por el descenso de los créditos al consumo, que cayeron un 3,7% en el séptimo mes del año en comparación con 2010, hasta los 207.707 millones de euros.
De la misma forma, la deuda hipotecaria cayó un 1,1% en ese mismo periodo y se situó en 671.308 millones de euros, lo que supone el 76% del endeudamiento total de los hogares.
Esta proporción se mantiene desde varios años, ya que la caída de la inversión en vivienda ha sido paralela a la del endeudamiento total, por lo que el importe que las familias destinan a su hogar ocupa la mayor parte de su ahorro.
Al comparar con las cifras del mes anterior, la deuda de las familias bajó un 0,4% en julio después de haber repuntado ligeramente en junio. Los créditos al consumo cayeron un 1,8%, mientras que la deuda hipotecaria se mantuvo prácticamente estable.
La deuda de las empresas cae un 0,9%
Por su parte, la deuda de las empresas cayó un 0,04% en tasa intermensual y un 0,9% en tasa interanual, hasta los 1,2 billones de euros, debido, sobre todo, a la caída del 2,9% de los préstamos de entidades de crédito residentes y préstamos titulizados fuera de balance, hasta los 868.583 millones de euros.
En cambio, los valores distintos de acciones crecieron un 7,3% en el séptimo mes del año, hasta 67.169 millones, mientras que los préstamos al exterior aumentaron un 2,7%, hasta los 351.679 millones de euros.