Tras el aluvión de críticas que ha recibido el Gobierno, el PP ha aceptado en el Congreso tramitar la iniciativa popular a favor de la llamada «dación en pago» en los desahucios, que cuenta con 1,4 millones de firmas. Igualmente, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha accedido a rebajar las tasas judiciales.
A última hora de la tarde de ayer y después de que se difundiera la noticia del suicidio de una pareja que se veía abocada a perder su vivienda, el portavoz parlamentario del PP, Alfonso Alonso hizo oficial la rectificación del PP. El portavoz también se había entrevistado con Ada Colau, representante de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Sin embargo, han matizado a Colau que admitir que se tramite la iniciativa popular no supone aceptar sus exigencias ni postulados.
Revisión a las tasas judiciales
Al mismo tiempo que el Grupo Popular evitaba rechazar una iniciativa que llegaba al Congreso con 1,4 millones de firmas, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, aprovechaba para anunciar cambios, con rebajas, en la ley de tasas judiciales y se apoyaba para ello en las recomendaciones que ha hecho la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril. La próxima semana está convocada una huelga de jueces y fiscales.
El ministro adelantó la reducción de esas tasas, aprobada por el Gobierno hace dos meses, por la vía de un decreto que, por ejemplo, las suprimirá en el caso de los desahucios cuando afecten a primera vivienda. Ruiz-Gallardón explicó que introducirán «modulaciones a la baja» en las cuantías fijas y variables en primera instancia, civil y contencioso-administrativo, además de rebajar las tasas en función de la capacidad económica para personas jurídicas y en ejecuciones arbitrales de consumo.
Se tramitarán al mismo tiempoFuentes del Grupo Popular explicaron después que tanto la reforma legal aprobada por el Gobierno como la iniciativa popular (que propone la dación en pago al estilo estadounidense y con efectos retroactivos) se tramitarán en la Cámara al mismo tiempo. Los demás grupos, incluidos los que están en contra de la «dación en pago» como CiU o el PNV, ya habían anunciado que iban a votar a favor de la toma en consideración.