La demanda de papel higiénico sigue creciendo en los hogares españoles, a pesar del llamamiento a la calma de la industria papelera. La histeria y la compulsividad, sobretodo en los primeros momentos de la crisis del coronavirus en España, hicieron que la población se lanzará en masa hacia los supermercados. Si algo sorprendió a muchos fue el hecho de que los ciudadanos agotasen, entre otros productos, el papel higiénico que había disponible en los estantes de los establecimientos.
Las autoridades se apresuraron en tranquilizar a la sociedad asegurando el abastecimiento de los bienes de primera necesidad durante el estado de alarma, pero la incertidumbre y el miedo hicieron a muchos llenar sus despensas.
Industria papelera
Ahora, en plena pandemia por el COVID-19, las empresas de papel sanitario mantienen su «plena capacidad de producción». Funcionan para «rellenar» los stocks existentes antes del anuncio del estado de alarma, ya que la demanda de los hogares españoles sigue siendo más alta de lo habitual en circunstancias normales.
El director general de ASPAPEL, la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón, Carlos Reinoso, señala que en la segunda semana de confinamiento y una vez pasado el efecto acopio inicial, la demanda «se normalizó algo». Eso sí, «aún sigue siendo más alta comparada con una situación normal».
Así, precisa que al inicio de la pandemia, la demanda de papel higiénico creció hasta un 50 por ciento por encima de los niveles normales, por el «efecto acopio que muchos hogares realizaron». Reinoso explica que este incremento de la demanda se atendió «principalmente» o «en gran parte» a los stocks disponibles al inicio de la crisis sanitaria, aunque también, pero en mucha menor medida, con un aumento de la producción en las plantas.
Además, garantiza que en todo este tiempo «no se ha producido ningún problema». Tampoco se ha registrado una falta de papel higiénico para los consumidores españoles, en cuanto a la producción, ya que las diez plantas de papel sanitario (papel higiénico, pañales, compresas, servilletas y pañuelos) están operando con normalidad.
Eso sí, con las medidas de sanidad establecidas en el marco de las adoptadas para frenar la pandemia del coronavirus.
Reinoso opina que era, por un lado, «esperable» este pico de demanda ya que en «todas» las situaciones de tensión, crisis, preocupación, muchos de sus papeles se convierten en objeto de deseo.
«El papel higiénico es el caso más paradigmático y no deja de ser algo irracional, ya que pese a ser un producto indispensable este acopio no está justificado», considera el director general de ASPAPEL.
Además, achaca esta demanda a un «mecanismo de autoprotección» que da seguridad psicológica y genera un «efecto placebo».
Pero «lo fundamental», según subraya, es que España tiene «capacidad de producción para un demanda normal, pero también para un pico de demanda que aún sigue por encima de un mes normal«.
Sector comprometido con la crisis del coronavirus
Con motivo del contexto motivado por el COVID-19, ASPAPEL agradece el esfuerzo de los trabajadores. Éstos han extremado sus medidas de protección y prevención, para que «prácticamente» todas las fábricas estén funcionando «con normalidad y a pleno ritmo».
De esta manera, aseguran la disponibilidad de este bien básico.
Si bien, admite que alguna de las fábricas ha tenido que reorganizar y reforzar los turnos al entrar alguno de sus trabajadores en cuarentena y/o por dificultades de acceder a su puesto de trabajo (especialmente en la zona de Igualada, Barcelona).
Más papel higiénico que demanda existente
«El acopio realizado no está justificado, pues España tiene capacidad suficiente de fabricación de este tipo de papeles, no solo para una situación normal, sino incluso para puntas de demanda». Reinoso achaca los problemas «muy puntuales» de desabastecimiento «subsanados rápidamente» no a la falta de producción, sino por las limitaciones en los puntos de venta en su capacidad de reposición de los estantes.
Así, manifiesta que el sector es muy consciente de que las medidas sanitarias deben hacerse de manera cuidadosa para que la fabricación y distribución de productos esenciales no se ponga en riesgo. Y esto no es solo así en la producción del papel sanitario, sino del conjunto de envases para la alimentación o el sector farmacéutico.
En la actualidad, España cuenta con ocho empresas y un total de 10 fábricas de papel higiénico y sanitario que en 2019 tuvo una producción de 777.400 toneladas, un 8,2 por ciento más que el año anterior.