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Mejorar la calificación energética de una vivienda ahorra

El propietario de una vivienda que mejore su calificación energética puede ahorrarse al año un 74% del consumo de luz y gas, o lo que es lo mismo, 5,21 euros por cada metro cuadrado construido, de modo que un piso de 110 metros ahorraría 572,29 euros.

Esta es la principal conclusión del estudio «Precost&E», dirigido por el profesor de la Universidad Politécnica de Madrid Justo García Navarro, en colaboración con la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima), presentado el lunes.

La primera fase de la investigación se ha centrado en mejorar de E a B la calificación energética de un edificio real de 143 viviendas protegidas situado en Vallecas, al sur de Madrid.

La calificación energética de los edificios admitida por el Código Técnico de la Edificación (CTE) va desde la más alta, A, a la más baja, E. En términos de sostenibilidad ambiental, el ahorro supone casi 30 kilogramos de CO2 por metro cuadrado anuales.

La directora gerente, Marta Torres, señaló que tener una vivienda eficiente «no sólo ahorra en consumo y mejora el medioambiente, sino que es, además, una opción muy rentable», puesto que la inversión que el comprador debe realizar «se ve compensada con creces en el ahorro de las facturas que le llegan a final de mes».

La inversión sí compensa el ahorro

El estudio pretende desmitificar la creencia de que para ser eficiente hay que realizar una inversión que no compensa el ahorro, y señala que saber el precio de la vivienda no significa conocer cuánto va a costar ésta a su inquilino.

En este sentido, afirma que pasar de una vivienda con calificación E a una que tenga B supondría un incremento de la cuota hipotecaria de 219 euros al año, pero generaría un ahorro de más del doble en el consumo anual de suministros.

Otro de los objetivos es subrayar la importancia que tienen las tareas de investigación y desarrollo en la promoción inmobiliaria, y señalar la dirección estratégica que debe tomar el sector, hacia la responsabilidad social y la sostenibilidad medioambiental.

El subdirector general de Innovación y Calidad de la Edificación del Ministerio de Vivienda, Javier Serra, indicó que el ministerio revisará los requisitos de eficiencia energética del CTE cada cinco años, y señaló que la próxima década será un periodo «crucial que ha de servir para cambiar las cosas».

La segunda fase del estudio analizará los resultados para este mismo edificio en zonas climáticas diferentes, concretamente las ciudades de Barcelona, Sevilla, Valencia y Oviedo.

Nace la plataforma para el Fomento de la Rehabilitación (RHÈ+)

Este estudio se ha realizado precisamente en el momento en que nace la Plataforma Social para el fomento de la Rehabilitación, la Accesibilidad y la Eficiencia energética de edificios y viviendas (Plataforma RHÈ+), cuyo acto de presentación ha presidido la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor.

La ministra ha explicado que este acto simboliza “lo importante de enviar a la sociedad este mensaje de compromiso de todos con la rehabilitación”. “Hoy estamos todos de acuerdo en que un futuro más sostenible está en estrecha relación con un modelo urbano que prime la regeneración de la ciudad consolidada y la rehabilitación de viviendas, edificios y barrios, con hogares menos contaminantes y energéticamente más eficientes, y, por supuesto, más confortables para quienes los habitan”, ha dicho Corredor. Porque, ha puntualizado la titular de Vivienda, “durante demasiado tiempo hemos dado por sentado que tener más era una condición necesaria para vivir mejor”.

Corredor  ha destacado, además, que el Gobierno impulsa esta nueva forma de hacer ciudad en línea con los planteamientos de la Estrategia Europa 2020 y con la Agenda Urbana Europea.

Fomento del empleo

Se trata de fomentar no sólo la sostenibilidad de la edificación desde el punto de vista energético, sino también desde el punto de vista económico. Así, la ministra ha recordado el “inmenso campo de actividad económica y de generación de nuevos empleos que ofrecen la regeneración urbana y la rehabilitación”, porque, ha señalado, “por cada millón de euros invertidos, se generan más de 50 puestos de trabajo”. Por eso, ha dicho, “tenemos la obligación de aprovechar este ingente potencial económico” en un país en el que la mitad del parque edificado supera los 30 años de antigüedad.

Corredor se ha referido a las oficinas de rehabilitación, creadas ya en muchas ciudades, financiadas con la colaboración de todas las administraciones y que pueden ser complementadas desde el sector privado. “Estas oficinas juegan un papel fundamental como punto de encuentro entre los técnicos, las empresas y los ciudadanos, facilitando una asistencia directa, personal y cualificada”, ha añadido.

Corredor ha hecho referencia a los tiempos de concesión de las licencias para este tipo de intervenciones “que pueden y deben mejorarse, así como reforzarse las medidas de seguridad y de salud laboral en las obras, así como su gestión medioambiental”.

Objeto y compromisos de la Plataforma RHÈ+

El objeto de la Plataforma es compartir la responsabilidad para facilitar y fomentar las obras de rehabilitación del parque residencial existente, ahorrando energía, mejorando su accesibilidad y potenciando el mantenimiento, la generación y la formación del empleo en esta específica actividad, con el compromiso de todos los sectores y administraciones implicados en la rehabilitación, la accesibilidad y eficiencia energética de edificios y viviendas ya construidos.

Entre los compromisos recogidos en la misma destacan:

  • Abonar las subvenciones establecidas en los programas de rehabilitación en el plazo máximo de dos meses desde la terminación de las obras.
  • La creación de registros voluntarios de empresas homologadas RHÈ+ para la realización de obras de rehabilitación.
  • Promover la concesión de las licencias de obra menor en el plazo de un mes y se agilizará la concesión de las licencias mediante el uso de medios telemáticos.
  • La creación de un portal web específico que contenga la información de las ayudas públicas en cada comunidad autónoma, agentes, empresas homologadas y entidades que se vayan sumando a la Plataforma; los compromisos adquiridos, la situación de las oficinas Técnicas de Rehabilitación y la información que los fabricantes de materiales puedan facilitar para la realización de las obras y la formación de los agentes, técnicos y empresas que colaboran en los procesos de rehabilitación. También, la relación de las entidades financieras adheridas y los productos financieros que ofrezcan.
  • Ampliar la formación de trabajadores, agentes, técnicos y empresas en las nuevas tecnologías que hacen posible la rehabilitación de edificios y viviendas así como fomentar la cualificación de los desempleados del sector de la construcción.
  • Creación de Oficinas Técnicas de Rehabilitación en los Colegios Oficiales de Arquitectos, de Aparejadores y Arquitectos Técnicos y en aquellas zonas y barrios donde los Colegios y los Ayuntamientos las consideren necesarias para mejorar el estado de las edificaciones y la calidad de vida de sus habitantes.

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