Las seis grandes constructoras cotizadas (ACS, Acciona, FCC, Ferrovial, Sacyr y OHL) contaban a cierre de 2011 con una cartera de obras para ejecutar fuera de España por valor de 72.275 millones de euros, importe que casi triplica (+161,7%) al de un año antes.
Este dato contrasta además con el descenso del 17% que acumulaba la cartera de obras de estas empresas en el mercado doméstico a cierre del pasado año, hasta situarse en 19.493 millones de euros.
Los proyectos de las grandes constructoras en España representan así apenas una cuarta parte de la carga de obra internacional, que a su vez copa el 78% de la cartera total de obra con que estas firmas cerraron 2011 (91.770 millones de euros).
El incremento de trabajos en el exterior es fruto de la estrategia de internacionalización que las seis constructoras siguen desde hace años, que les ha llevado a comprar empresas en terceros países y lograr destacados proyectos, como el AVE La Meca-Medina o el túnel bajo el Estrecho del Bósforo, ambos conseguidos en 2011.
Asimismo, también deriva del parón de esta actividad en España, actualmente en mínimos históricos, por la reducción de la inversión en obra pública como consecuencia de los recortes presupuestarios.
De esta forma, las grandes constructoras tienen ya más de la mitad del total de sus obras en mercados exteriores. En concreto, el peso de las carteras internacionales oscila entre el 41% que supone para Acciona y el 91% de ACS, y arroja una media del 78%, según datos de las empresas.
