Las cantidades que una familia tiene que pagar al banco cada mes después de acometer un proceso de consolidación de deudas se reducen en un 63% de promedio, según el análisis de 22.000 expedientes tramitados por la Agencia Negociadora en los últimos 30 meses.
El 57% de las deudas que se renegocian en un proceso de refinanciación proceden de tarjetas de crédito y créditos rápidos, mientras que un 28% corresponden a la hipoteca y un 15% de créditos al consumo y personales.
El plazo medio de las nuevas hipotecas que soportan el conjunto de la refinanciación es de 20 años, 2,2 menos que hace 48 meses, mientras que los tipos de interés se sitúan entre el 3,5% y el 4,5% ya que, pese a que el precio del dinero está en mínimos históricos, las entidades de crédito aplican importantes diferenciales, explica la Agencia.
Los funcionarios, trabajadores indefinidos con antigüedad de al menos 24 meses en la misma empresa y pensionistas suelen ser las personas que más acometen estos procesos de agrupación de deudas.
Por ello, Agencia Negociadora recomienda elaborar un presupuesto familiar mensual y ajustarse al máximo a él para evitar sobreendeudamientos.
También aconseja dedicar una partida al ahorro, evitar el uso de las tarjetas de crédito como medio de financiación y hacerlo sólo como instrumento de pago, agrupar los préstamos en la hipoteca mejorando las condiciones y realizar una previsión razonable de la proyección de mejora económica.
