Según explica Eduardo Molet, consultor inmobiliario de entidades financieras españolas y extranjeras y fundador de Red Expertos Inmobiliarios, el valor real del suelo que poseen bancos y cajas es de apenas el 14% del precio en el que esta tasado actualmente, y los pisos de segunda mano tendrán que devaluarse en sus balances hasta un 69%.
La actual crisis financiera tiene en el problema inmobiliario de bancos y cajas una de sus principales causas. La exposición al ladrillo de las entidades financieras y la urgencia para sanearlo les obligará a devaluar drásticamente el precio, no sólo de los inmuebles, sino también del suelo que poseen.
Según las declaraciones de este experto, recogidas en el portal Urbanoticias, las entidades bancarias han estado evitando este problema desde 2007 esperando a que la economía mejorase, y hacerlo ahora, en el peor momento, dejará su precio real en apenas un 14% de la tasación actual. “El gobierno ha contratado dos consultoras para valorar los activos adjudicados de los bancos, pero por otras tasaciones que ya se han hecho se puede predecir que, una vez auditado el sistema financiero español, el saneamiento de la exposición al sector inmobiliario obligará a cajas y bancos a bajar el precio del suelo hasta un 86%”.
Además de por la crisis financiera, Eduardo Molet cree que esta previsible bajada de precios también está motivada por la situación actual del sector del suelo, en estado crítico. “Actualmente no existe un mercado del suelo. En la historia reciente, en España nunca antes se habían realizado menos transacciones de suelo como ahora. Las únicas que se realizan son por dación en pago a las entidades bancarias, o aquellas que se producen por la liquidación y cierre de una promotora. Ni tan siquiera existen ofertas por parcelas y solares, y si el precio está determinado por una demanda que ahora es inexistente, lo que queda es que el suelo que hay, no vale nada. De ahí que bancos y cajas tendrán que bajar su precio en un porcentaje tan elevado cuando comiencen a sanearse”.
El otro gran problema de las entidades financieras, el de los activos adjudicados, es cada vez mayor. Se calcula que estos activos ya alcanzan la cifra de más de 200.000 viviendas de segunda mano. Según Eduardo Molet, una vez comiencen a sanearse las entidades, el valor del balance quedará finalmente en torno al 31%. Es decir, bancos y cajas tendrán que devaluar sus balances un 69%.
¿Y cómo afecta todo esto al sector inmobiliario?
Para sanearse, las entidades financieras tendrán que sacar al mercado y vender todo su stock inmobiliario, y sólo podrán conseguirlo con rebajas en los precios de más del 60%, algo que ya han empezado a hacer con ofertas por encima del 50%. Así, particulares y profesionales del sector inmobiliario se verán obligados también a bajar sus precios para poder competir con bancos y cajas. “La única nota positiva de esta situación es que subirá el número de operaciones de compraventa, que es lo que más urge al sector”, añade Eduardo Molet.
“Para reactivar la economía española necesitamos crecer, y para ello es imprescindible exportar. Vender los activos inmobiliarios de las costas españolas en el extranjero ayudaría a resolver estos gravísimos problemas: el de la deuda y el del sector inmobiliario, y, en consecuencia, del conjunto de la economía de España”. En definitiva, explica Eduardo Molet, se trata de que la vivienda contribuya a incrementar las exportaciones de España, vendiendo los inmuebles de segunda residencia a extranjeros. Más de 200.000 están situadas en la costa española y en los archipiélagos de Baleares y Canarias”.