España registraba en el cuarto trimestre del año pasado 110 parados por cada vacante de empleo, una proporción muy elevada si se compara con los 17,5 desempleados por vacante existentes antes del estallido de la crisis en el verano de 2007, según datos de un informe elaborado por Asempleo y Afi.
Por sectores, las actividades relacionadas con el ocio y la construcción cuentan con más de 150 parados por vacante, frente a los menos de 20 desempleados por vacante que corresponden a las actividades sanitarias y profesionales.
No obstante, el número de parados por vacante se ha reducido un 17% entre el cuarto trimestre de 2012 y el mismo trimestre de 2013, lo que, según el informe, es un síntoma más de la «incipiente recuperación del mercado de trabajo» español.
Este descenso se debe tanto al recorte en un 1,4% del número de parados en este periodo, como al aumento de las vacantes existentes en un 18,8%. En cualquier caso, esta mejora no impide que el mercado laboral español sea de los menos eficientes de la UE.
Así, los autores del informe señalan que la eficiencia de un mercado de trabajo puede medirse por su capacidad para asignar parados a empleos vacantes, lo que no deja en buen lugar a España. De hecho, España es el segundo país de la UE, por detrás de Chipre (154 parados por vacante), con mayor proporción de desempleados por vacante, muy lejos de la media europea (12,3 parados por vacante).
Los datos de España y Chipre contrastan con los de Alemania o Reino Unido, donde la ratio de parados por vacante es de dos y cuatro desempleados por vacante, respectivamente.
La ratio parado/vacante es mayor en aquellos sectores que más se han visto afectados por la crisis. Encabezan la lista las actividades artísticas y entretenimiento (192,5 parados por vacante), seguidas de la construcción (149,7), y transporte y almacenamiento (107,2).
En el lado opuesto (excluyendo a las AA.PP), se sitúan sanidad y servicios sociales, con 16,7 parados por vacante; actividades profesionales, científicas y técnicas (20,3), e información y comunicaciones (26).
Según Asempleo y Afi, el principal motivo por el que el tejido empresarial no ofrece más vacantes es que su actual volumen de producción no requiere de más trabajadores. Si se incrementase su facturación, como así se prevé para los próximos meses, podría aumentar la contratación. Seis de cada diez vacantes (61,6%) se concentra en las pequeñas empresas, frente a algo más de un 20% en las grandes empresas.
Por otro lado, en el informe se señala que si en mayo y junio continúa la senda de avances interanuales superiores al 1% iniciada en abril, la ocupación podría incrementarse en unas 300.000 personas en el segundo trimestre del año, lo que situaría el total de ocupados en 17,42 millones de personas, nivel similar al de octubre de 2012.