El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, ha reconocido este jueves en la Comisión de Economía del Senado que «no hay satisfacción con el número de viviendas alquiladas del Fondo Social de Viviendas» y que este es el motivo por el que se va a realizar una revisión pasa saber «si el sistema es excesivamente exigente o poco atractivo».
«Espero que después de ese relajamiento de las condiciones, se llegue a un mayor nivel de uso de las viviendas que están comprometidas», ha señalado Latorre en alusión a la revisión y facilitación de los requisitos en la que está trabajado la Comisión de Coordinación y Seguimiento del Fondo.
En respuesta a la pregunta formulada por el senador del Grupo Socialista, Antonio Julián Rodríguez Esquerdo, el secretario de Estado de Economía ha aseverado que este Gobierno «es el que más ha hecho para evitar que aquellas personas con dificultades económicas pierdan su vivienda».
En este sentido, ha recordado que «se ha facilitado a los deudores el cumplimiento de sus obligaciones, se han aliviado algunas de las cargas que derivaban del incumplimiento hipotecario y se ha evitado en gran medida la posibilidad de llevar a cabo desahucios».
Así, ha asegurado que más de 14.000 personas se han beneficiado de las medidas en materia de vivienda del Gobierno, que el Código de Buenas Prácticas ha permitido 3.800 reestructuraciones de deuda, que se han firmado 1.300 daciones en pago y se han evitado más de 8.000 lanzamientos.
Por su parte, Rodríguez Esquerdo ha afirmado que el Fondo Social es «un rotundo desastre» y ha asegurado que «después de 14 meses, el Fondo no acaba de despegar, todavía está en la pista de lanzamiento».
De esta manera, el senador socialista ha expuesto que, aunque el Fondo cuenta con 5.891 viviendas, se han recibido 1.259 solicitudes, se han adjudicado 637 viviendas y se han formalizado 410 contratos. «Con estos datos, el Gobierno se tendría que preguntar qué es lo que pasa con el Fondo Social de Viviendas», ha añadido.
Además, Rodríguez Esquerdo ha defendido el esfuerzo que están realizando en esta materia muchos ayuntamientos y ha indicado que «no puede ser que los ayuntamientos, cada vez con menos competencias y dinero, sean los que abanderen las soluciones a este proyecto». «No pueden permitir que este Fondo Social sea otro fracaso estrepitoso de su política», ha zanjado