Se destinarán 321,61 millones de euros, el mismo importe que en el 2016, para ayudas estatales al alquiler de viviendas y a la rehabilitación y renovación de viviendas y barrios. Se prevé que esta inversión posibilite la concesión de más de 100.000 ayudas al alquiler y la rehabilitación o renovación de aproximadamente 35.000 viviendas, y supondrá la generación de aproximadamente 12.700 puestos de trabajo.
A este importe se suman 140 millones de euros que aportará el Ministerio de Fomento durante el ejercicio para las ayudas de subsidiación de préstamos vinculados a la vivienda, de los que se beneficiarán 140.000 familias
La comunicación del Ministerio coincide con el balance realizado por la Generalitat sobre ayudas destinadas a la vivienda social durante el pasado ejercicio. El Govern destinó el año pasado 109,2 millones de euros a prestaciones y ayudas para evitar la pérdida de la vivienda, lo que supone un incremento del 30% respecto al año anterior y más del doble (+115%) en comparación con los 50,8 millones de 2012.
La consellera de Governació, Meritxell Borràs, y el secretario de Habitatge, Carles Sala, han explicado en rueda de prensa este viernes que la mayor parte de estos recursos se destinaron a prestaciones para el pago del alquiler, concretamente 94,2 millones, el 86,2% del total.
El año pasado se otorgaron 50.357 prestaciones para ayudar a pagar el alquiler, un 31,5% más que en el 2015, más de la mitad a familias de la provincia de Barcelona, y Sala ha detallado que en los dos últimos años se han aceptado el 100% de las solicitudes que cumplían con los requisitos.
En cuanto al perfil de los beneficiarios de estas prestaciones, la edad media es de 45,9 años; el 32% de las familias tienen menos de 6.000 euros anuales de ingresos brutos; el importe medio del precio del alquiler por el cual piden ayudas es de 379,5 euros, y el importe medio de la subvención mensual es de 164,84 euros.