El peso de las casas unifamiliares en la compraventa de viviendas alcanzó en el tercer trimestre máximos históricos. Por su parte, la compra de pisos se situó en mínimos. Estos son algunos de los datos que se rescatan de un informe de los Registradores de la Propiedad que relaciona estos movimientos con el Covid-19.
Una de cada cinco operaciones de compraventa de viviendas realizadas en el tercer trimestre, en concreto el 20,4%, se destinó a la adquisición de viviendas unifamiliares, normalmente con mayor superficie media y espacios abiertos (terrazas y jardines), porcentaje casi dos puntos superior al del segundo trimestre.
Al mismo tiempo que ha aumentado el peso de las viviendas más grandes y con espacios abiertos, ha descendido el de los pisos hasta mínimos históricos: sólo el 79,6% de las compraventas del tercer trimestre fueron operaciones sobre viviendas colectivas (pisos). «La evolución de los resultados muestra una intensificación de la preferencia por la modalidad de vivienda unifamiliar«, afirman los Registradores, que consideran que estos datos confirman el primer impacto en las nuevas tendencias en la adquisición de viviendas por la influencia de la pandemia.
Superficie de las viviendas
Otro dato que corrobora este cambio de hábitos en las compraventas de viviendas es la superficie media. Ésta se incrementó en el tercer trimestre hasta alcanzar su máximo de la serie histórica, con 101,7 metros cuadrados para el conjunto de viviendas.
En el caso de la vivienda nueva libre, la superficie media transferida se ha elevado hasta los 110,2 metros cuadrados, cerca del máximo histórico del segundo trimestre (110,4 metros cuadrados). Por su parte, la vivienda usada alcanzó una superficie media de 100,25 metros cuadrados, lo que supone su mayor registro de la serie histórica. «Se está produciendo una generalización del crecimiento de la superficie media transferida, ratificando el cambio de preferencias en el actual contexto de crisis sanitaria, demandando preferentemente viviendas con mayor superficie«, subrayan los Registradores.
El informe revela que la demanda se está focalizando en mayor medida en los pisos con mayor superficie. De este modo, en el tercer trimestre, el 53,3% de las compras de pisos han sido de superficie superior a 80 metros cuadrados, con un incremento del peso relativo de casi tres puntos en relación al mismo trimestre de 2019. Los pisos de entre 60 y 80 metros han supuesto el 27,6% de las compraventas, los de entre 40 y 60 metros el 15,8% y los de menos de 40 metros, sólo el 3,4%.
En los últimos doce meses, las compraventas de pisos de más de 80 metros cuadrados han supuesto el 51,7%, por debajo del 53,3% del último trimestre, lo que, según los Registradores, confirma de nuevo la tendencia a adquirir pisos de mayor superficie. Asimismo, el informe apunta «a una cierta inercia» hacia la búsqueda de vivienda en núcleos poblacionales con menor densidad.