La apuesta por el alquiler y el impulso a la rehabilitación son los ejes fundamentales del Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación (PEVR) 2009-2012, y también están presentes en los objetivos de la presidencia española de la Unión Europea.
En concreto, la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, ha dicho esta semana que el objetivo de su departamento para la próxima década es que la rehabilitación suponga el 35 por ciento de la actividad en el sector residencial, frente al 25 por ciento actual, porcentaje alcanzado en el último año a causa de la crisis.
Durante la jornada «La contribución de la vivienda social en la estrategia para 2020», organizada por el Ministerio de Vivienda, el Comité Europeo de Coordinación de la Vivienda Social (CECODHAS) y la Asociación de Promotores Públicos de Vivienda y Suelo (AVS), Corredor explicó que en el último año la rehabilitación ha crecido un 20 por ciento, frente al desplome de la producción de nuevas viviendas, con lo que ya supone una cuarta parte de la actividad del sector inmobiliario residencial.
Alquiler y rehabilitación, ejes de la política europea
El Ministerio también tiene como objetivo que el porcentaje de familias que optan por el alquiler llegue en 2020 al 20 por ciento, lo que implicaría duplicar la tasa actual.
La apuesta por el alquiler y el impulso a la rehabilitación son los ejes fundamentales del Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación (PEVR) 2009-2012, y también están presentes en los objetivos de la presidencia española de la Unión Europea.
En concreto, el eje de la presidencia de España en materia de vivienda será el enfoque integrado de las políticas de rehabilitación y de desarrollo urbano, explicó Corredor. La ministra subrayó la doble vertiente de dichas políticas como apuesta por la sostenibilidad medioambiental y como instrumento para generar empleo, destacando el papel que juegan no sólo en la recuperación económica y en la lucha contra el cambio climático, sino también en la lucha contra la pobreza y la exclusión social.
Por esta razón, consideró razonable que exista una mayor cooperación en el ámbito comunitario, aunque la política de vivienda sea competencia de cada Estado.