El impacto del coronavirus en los precios de la vivienda todavía está en fase de análisis. Lo cierto es que la tendencia a la baja de los inmuebles residenciales en España ya era algo que se estaba dejando notar desde principios de 2020, si bien la llegada de la pandemia ha profundizado en la trayectoria descendente de este indicador.
Según el portal inmobiliario pisos.com, la bajada de los precios generada por la Covid-19 obedece a varios factores. En primer lugar, la destrucción de empleo ha alcanzado cotas históricas. Dado que las familias han visto reducidos sus ingresos, las decisiones de compra han entrado en un punto muerto. Obviamente, en un entorno de inestabilidad laboral, convertirse en propietario es un objetivo que pasa al segundo plano. Es por ello que, al bajar la demanda, los precios dejan de estar tan tensionados. Esta situación está siendo aprovechada por muchos inversores, que tratan de contraofertar con bajadas de entre el 15% y el 20% sobre el precio de salida, algo que no todos los vendedores están dispuestos a hacer.
Por otro lado, la oferta de producto en venta está aumentando. Desgraciadamente, la pandemia ha atacado de forma drástica a la población más anciana, volcando en el mercado los inmuebles de los que eran dueños. La tónica general es que estos activos, en manos ahora de los herederos, traten de venderse lo antes posible, con el fin de que los descendientes extraigan un monto que, en estos momentos de dificultades económicas, es de agradecer. Por lo tanto, el precio que tendrán estos inmuebles estará adecuado a las circunstancias para cerrar la operación en poco tiempo. En la misma línea, empresarios con propiedades cuyos negocios se hayan visto afectados por la pandemia, también tratarán de obtener liquidez rápida poniendo en venta inmuebles que ahora actúan de colchón financiero. En este sentido, al subir la oferta de viviendas en venta, los precios también se relajan.
A la hora de comprobar cómo están evolucionando los precios en la geografía española, nos damos cuenta de que los precios tienden a la regularización, registrando suaves subidas y contenidas bajadas a nivel nacional. De hecho, según el informe mensual de precios de venta de pisos.com, el precio medio de la vivienda de segunda mano en España subió un 0,44% en agosto frente al mes de julio y un 0,86% frente a agosto del año pasado.
Frente a agosto de 2019, los repuntes más llamativos en el ámbito de las comunidades autónomas se dieron en Navarra (4,87%), Canarias (4,23%) y Baleares (3,61%), registrándose los ajustes más intensos en Castilla-La Mancha (-3,13%), La Rioja (-2,22%) y Murcia (-1,59%). En cuanto a las provincias, los incrementos más relevantes de un año a otro se localizaron en Santa Cruz de Tenerife (6,39%), Huelva (6,13%) y Teruel (5,94%). Las bajadas más pronunciadas las arrojaron Lugo (-12,63%), Jaén (-7,11%) y Zamora (-6,96%). En cuanto a las capitales de provincia, las subidas interanuales más intensas se produjeron en Donostia-San Sebastián (9,57%), Palma de Mallorca (8,30%) y Bilbao (7,44%). Las que más bajaron fueron Córdoba (-5,82%), Teruel (-5,48%) y Jaén (-4,81%).