La deuda neta de las entidades españolas con el Banco Central Europeo (BCE) se redujo un 0,7% en el mes de julio, hasta los 248.293 millones de euros, el undécimo descenso mensual consecutivo, con lo que se estabiliza en niveles mínimos de marzo de 2012, según los datos del Banco de España.
Este importe es el saldo vivo que las entidades residentes en España aún tienen pendiente de devolver al instituto emisor europeo como consecuencia de la financiación que el organismo les ha concedido previamente. El nivel de julio es el más bajo desde hace 16 meses, cuando la deuda neta de la banca con el BCE se situó en 227.600 millones.
La mejoría del crédito solicitado por la banca española al instituto que preside Mario Draghi tras un año desde la petición del rescate bancario se constata en el desplome interanual del 33,9%. Comparado con julio de 2012, la deuda neta de la banca con el BCE se redujo en 127.256 millones.
Este importe se incrementó en casi 80.000 millones en marzo de 2012 y superó la barrera de los 200.000 millones. Desde ese momento, la deuda creció hasta alcanzar el máximo de 388.736 registrado en agosto del pasado año, para ir disminuyendo después paulatinamente.