Las ayudas económicas que reciben los 314 diputados de circunscripciones distintas a Madrid para gastos de alojamiento y manutención en la capital ha vuelto a situarse en el centro del debate político, de la mano del Partido Socialista, en un momento en que los barómetros del CIS demuestran que en los últimos diez años la clase política ha cuatriplicado la tasa de población que la incluye en su lista de preocupaciones, y en los que la situación económica ha obligado al Gobierno a llevar a cabo los mayores ajustes de la democracia.
«Ese tema está abierto. Soy consciente de que los ciudadanos nos están interpelando por ello y creo que indudablemente vamos a tener que hablarlo y dar alguna solución». Así se expresaba en declaraciones a Europa Press la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez. Su partido quiere proponer al resto de grupos parlamentarios crear un equipo de trabajo tras el verano para analizar la indemnización que mensualmente perciben los diputados electos por provincias distintas a Madrid. Ese análisis servirá para comprobar si se precisan cambios o, al menos, intensificar las explicaciones sobre estas retribuciones, o incluso exigir que se justifiquen los gastos.
Las dietas a debate
Según la Constitución, son las propias Cámaras las que fijan la asignación económica de diputados y senadores. El Reglamento del Congreso de los Diputados (RCD) establece que, además de esta asignación económica, los parlamentarios de la Cámara Baja tienen derecho a las ayudas, franquicias e indemnizaciones por gastos que sean indispensables para el cumplimiento de su función. Y la cuantía que se ha puesto en entredicho es aquella que reciben sus señorías como indemnización para gastos de alojamiento y manutención en la capital, que además está exenta de tributación.
Los diputados de circunscripciones distintas a Madrid reciben por este concepto 1.823 euros, mientras que los electos por la capital perciben 870,56 euros, ambas cantidades irrenunciables. Esos 1.823 euros los emplean algunos en cubrir los gastos de los hoteles en los que tienen de hospedarse. Otros optan por comprar una casa en la capital y pagan con ello la hipoteca. Pero de los 314 diputados de circunscripciones distintas a Madrid, se estima que entre 60 y 70 poseen un inmueble en la capital, lo que ha provocado que se hayan recogido ya más de 90.000 firmas en plataformas de protesta ciudadana a través de internet pidiendo que se revisen estas dietas.
Desde el PSOE, Soraya Rodríguez aseguró que el problema no es el concepto en el que se utiliza ese dinero, pues va más allá del alojamiento en Madrid, y también sirve para cubrir gastos por una actividad política que se desarrolla en todo el país. Aunque admite que «habrá que hacer una reflexión» sobre el complemento y tal vez sea momento de exigir una justificación de gastos.
«Ajustar» la retribución
En la misma línea se ha expresado el Partido Popular. El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Alfonso Alonso, se mostraba a favor de que se vayan «ajustando» esas retribuciones, aunque habría que revisar «caso a caso», algo «complicado».
Alonso explicó que los diputados que viven en Madrid pero han sido elegidos por otra circunscripción «tienen que tener algún tipo de asistencia para poder realizar su función», ya que trabajan tanto en la capital como en la provincia por la que han sido elegidos. «El hecho de que algunos estén en Madrid no quiere decir que no estén también fuera o que no tengan que mantener su casa o su alojamiento en su circunscripción», dijo.
«Yo entiendo que ahora está de moda hablar de estas cosas sobre si la retribución de los diputados es adecuada o no. Pero es verdad que los diputados españoles son los que menos cobran de Europa», recordó.
